¿Un Adviento en familia?
¿Te has preguntado por qué la Iglesia da un tiempo especial para preparar nuestro corazón antes de la Navidad? Aquí te compartimos la importancia de decir:
¡Ven señor Jesús a nuestro hogar!
Estamos iniciando el año litúrgico con el Adviento. El Adviento es tiempo de preparar la venida de Jesús a nuestro hogar.
Tiempo de preparar la venida de la Navidad, así como preparamos y organizamos un evento familiar importante (como el bautizo o cumpleaños de nuestros hijos).
Momentos inolvidables.
Es tiempo de ir creando momentos inolvidables en familia, preparando la llegada de la Navidad.
De niña, mi papá nos ponía a cantar y bailar villancicos en familia y aún lo recuerdo con alegría y gozo, pues existen muchas fiestas en el año litúrgico, pero nada como la Navidad.
Ya lo dijo Santa Teresa de Jesús: “Todas las fiestas de la Iglesia son hermosas… la Pascua, sí, es la glorificación… pero la Navidad posee una ternura, una dulzura infantil que me atrapa todo el corazón”.
La Navidad tiene ese algo especial, que nos recuerda a la infancia y los sentimientos puros y verdaderos de la niñez.
Vivamos este tiempo de Adviento con ilusión y alegría con la que la vivíamos de niños.
Tengo una hija de 4 años llamada Leslie y un hijo de 6 años llamado Leo y están muy entusiasmados por la Navidad.
Desde tiempo atrás, me insistían para sacar los adornos, el arbolito de Navidad y van contando los días que faltan.
Me recordaban la cita de Mateo 18, 3 “En verdad les digo que, si no se convierten y se hacen como niños, no entrarán en el reino de los cielos”.
Si no recuperamos la ilusión y alegría como nuestros hijos, nos perderemos de vivir el reino de los cielos, que llega con la venida de Dios a nuestro hogar, con la llegada de la Navidad.
¿Cómo preparar el camino de Adviento para Navidad?
Recuerdo que cuando era niña, mi mamá nos hacía limpiar toda la casa en familia. para poder adornarla de Navidad.
Existen varias formas de prepararnos para Navidad:
1) Limpiando nuestro corazón
Un corazón limpio puede ver a Dios: en sus hijos, esposo y en los demás. Una forma de limpiar nuestro corazón es cuidando nuestros pensamientos.
Para que estén libres de celos, mentiras, comparaciones, suposiciones, prejuicios, que nos impiden amar libremente.
Limpiemos este Adviento nuestra boca de reproches, gritos, reclamos, amenazas, insultos y chantajes. Pues de lo que abunda en mi boca está lleno mi corazón
2) Vivamos en familia acciones de caridad a los más necesitados
Dejemos en nuestros hijos recuerdos que les ayuden a ser sensibles a los demás y compartir, viviendo la alegría de dar.
Hace unos días estaba con mis hijos en la pollería y estaban unos niños jugando con unos juguetes rotos.
Saliendo, les dije que ellos tenían muchos juguetes, que iríamos a la casa y traerían uno para ellos.
Llegando, mi hijo tomó un barco de la patrulla canina (de sus favoritos) y estaba dispuesto a regalarlo sin ningún problema.
En ese momento, la que ahora no quería regalar los juguetes era yo, pues sabía que era un juguete caro.
Sin embargo, esa actitud de mi hijo, me ayudó a ser consciente de la importancia de dar sin regatear, dar sin ver el precio, como los niños, como Dios nos da a nosotros.
Recordé esa canción que dice: ¿qué tendrá lo pequeño que a Dios tanto le agrada?
3) Cuida los Sacramentos
En este tiempo de Adviento recurramos a la confesión, la Eucaristía y cuidemos nuestro sacramento del matrimonio.
La mejor forma de preparar la Navidad es amándonos, que mi mejor adorno sea la dulzura con la que trato a mi esposo (a), la ternura con la que le hablo a mis hijos, que un adorno esta Navidad sea la alegría de vivir en familia.
«En esto conocerán todos que son mis discípulos, si se tienen amor los unos a los otros.» Juan 13,35,
La Navidad es:
Amar en lo sencillo y cotidiano. Como dice San Jeremías: En la sencillez de tu labor ordinario, en los detalles monótonos de cada día, has de descubrir el secreto para tantos desconocidos. El amor.
La alegría de lo sencillo. Con gestos de amor, acercar a mi esposo e hijos a Dios.
Como lo dice la madre Teresa de Calcuta: Cada obra de amar llevada a cabo con todo el corazón siempre lograr acercar a la gente a Dios.
Esperar a Aquel que es luz. Que llega hecho un niño, sin rollos, sin muchas luces, que llega en el silencio.
Sencillez y un poco de silencio. Porque si no, en medio del ruido nos perdemos de lo sencillo, deslumbrados por tantas luces no vemos la verdadera luz.
Esa luz a veces viene por medio de tu vecino, esposa, esposo, amigo. Hay días, que te tocara ser la luz de la Navidad en tu casa, otras veces en el trabajo, otra donde más te cuesta amar. No te guardes tu luz.
Entonces te das cuenta de que la Luz siempre llega en medio de las tinieblas, y no hace ruido, se instala.
La Navidad es eso, un niño, “La alegría de lo sencillo” un niño que nace sin hacer ruido, porque cuando el Amor ama, no hace ruido, no busca ser reconocido.
Ante la oscuridad de mucha gente sin ilusión, distraída y angustiada por comprar y tener todas las cosas listas para la cena navideña.
Siempre tenemos dos opciones, o quejarnos de la falta de luz o poner la parte de luz que a nosotros nos toca.
Ahora que ya sabes de qué se trata el Adviento.
Responde estas preguntas:
1. ¿Qué acciones cotidianas voy a realizar para preparar este tiempo de Adviento en familia?
2. ¿Qué momentos inolvodables quiero ir contruyendo en familia este Adviento?
3. ¿Dónde entiendo que estoy llamado a ser luz este tiempo de preparación para Navidad?
Oración
Gracias Señor, por el comienzo del Adviento. Tú eres la única esperanza que no nos defrauda.
Haznos capaces de mantener cada día la luz del amor que vela trabajando, sin permitir que se nos distraiga la mente con el vicio, el egoísmo, el dinero, la soberbia y la ambición.
Querernos vivir preparados, esperándote siempre alegres, ven Señor Jesus a nuestro hogar. Amén
Liliana García.
Recuerda que, si has intentado hacer algún cambio que te ha costado y no lo has logrado, o estás pasando por algún momento de dificultad o de crisis.
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Un Psicólogo Católico es un profesional de la Psicología, con un enfoque científico, fundamentado en la antropología cristiana-católica.
Si quieres profundizar más acerca del Adviento, te recomendamos leer: Ángelus 28 noviembre 2021