¿Cuáles son los pasos de preparación para la Consagración al Sagrado Corazón de Jesús?
Primero:
- Tener el deseo de Consagrase al Sagrado Corazón. Como todo acto de fe, requiere de la propia voluntad para emprender el camino a la Consagración. Es Cristo que nos llama a realizar el acto en plena libertad y conciencia.
Segundo:
- Profundizar en el conocimiento del Culto al Corazón de Jesús. No basta con la sola intención, sino que esta debe ser el impulso para iniciar una búsqueda profunda de los alcances que tiene este Acto en la vida personal, es necesario empaparse del significado y sentido de la divina consagración.
- Compartimos aquí las charlas impartidas por los Heraldos del Evangelio impartida en su canal de YouTube:
- Charla 1 La muerte de nuestro Señor Jesús.
- Charla 2 Introducción a la gran revelación a Santa Margarita María Alacoque.
- Charla 3 Místicos bienaventurados.
- Charla 4. Fórmula de consagración y consagración de España.
- Agradecemos a los Heraldos del Evangelio su gran apostolado, los encomendamos a su oración y les pedimos apoyarles en su portal www.heraldosdelevangelio.com
Tercero:
- Confesarse y Comulgar. Se recomienda preparar nuestro corazón para realizar nuestro Acto de Consagración. Para ello, resulta importante reconciliarse con el Señor, estar en Gracia.
Cuarto:
- Elige un Primer Viernes de Mes para consagrarte en un modo ritual en una Misa (después de la homilía).
- Jesús prometió a Santa Margarita María de Alacoque que concederá a todos aquellos que comulguen nueve Primeros Viernes de mes seguidos, la gracia de la penitencia final: «No morirán en desgracia mía, ni sin recibir sus Sacramentos, y mi Corazón divino será su refugio en aquél último momento».
- Por eso, consagrarse el Primer Viernes del mes es el inicio del camino a la entrega personal a la Misericordia de Jesús y el Encuentro con su Sagrado Corazón.
- El día de tu consagración lleva un escapulario o medalla del Sagrado Corazón de Jesús. Solicita la bendigan pues será señal de tu consagración.
CONSAGRACIÓN AL CORAZÓN DE JESÚS.
De Santa Margarita María De Alacoque.
Yo _____________________________________________________________, me dedico y consagro al Sagrado Corazón de nuestro Señor Jesucristo, le entrego mi persona y mi vida, mis acciones, penas y sufrimientos, para no querer servirme de ninguna parte de mi ser sino para honrarle, amarle y glorificarle.
Esta es mi voluntad irrevocable: ser todo(a) de El y hacerlo todo por su amor, renunciando de todo corazón a todo cuanto pueda disgustarle.
Te tomo, pues, Corazón divino por el único objeto de mi amor, el protector de mi vida, la seguridad de mi salvación, el remedio de mi fragilidad y de mi inconstancia, reparador de todas las faltas de mi vida, y mi asilo en la hora de la muerte.
Sé, por tanto, Corazón bondadoso, mi justificación para con Dios Padre, y aleja de mi los rayos de su justa indignación.
Corazón de amor, en ti pongo toda mi confianza, pues aunque todo lo temo de mi debilidad, todo lo espero de tu bondad. Consume, pues, en mí todo lo que pueda desagradarte o resistirte.
Que Tu amor se imprima tan profundamente en mi corazón que no pueda jamás olvidarte, ni verme separada de ti.
Te ruego encarecidamente, por tu bondad, que mi nombre esté escrito en ti, pues yo quiero construir toda mi dicha y mi gloria en vivir y morir como esclavo(a) tuyo(a). Amen.
Promesas del Sagrado Corazón de Jesús:
He aquí las promesas que hizo Jesús a Santa Margarita, y por medio de ella a todos los devotos de su Sagrado Corazón:
- Les daré todas las gracias necesarias a su estado.
- Pondré paz en sus familias.
- Les consolaré en sus penas.
- Seré su refugio seguro durante la vida, y, sobre todo, en la hora de la muerte.
- Derramaré abundantes bendiciones sobre todas sus empresas.
- Bendeciré las casas en que la imagen de mi Corazón sea expuesta y venerada.
- Los pecadores hallarán en mi Corazón la fuente, el Océano infinito de la misericordia.
- Las almas tibias se volverán fervorosas.
- Las almas fervorosas se elevarán a gran perfección.
- Daré a los sacerdotes el talento de mover los corazones más empedernidos.
- Las personas que propaguen esta devoción tendrán su nombre escrito en mi Corazón, y jamás será borrado de El.
- Les prometo en el exceso de mi misericordia, que mi amor todopoderoso concederá a todos aquellos que comulgaren por nueve primeros viernes consecutivos, la gracia de la perseverancia final; no morirán sin mi gracia, ni sin la recepción de los santos sacramentos. Mi Corazón será su seguro refugio en aquel momento supremo.
Concédenos, Dios todopoderoso, que, gozosos de honrar el Corazón de tu amado Hijo, al recordar la grandeza de los beneficios de su amor, merezcamos recibir gracias cada vez más abundantes de esa fuente celestial. Por nuestro Señor Jesucristo tu hijo que contigo vive y reina por los siglos de los siglos, Amén.
