Embarazo, un tiempo de espera. ¿Estas palabras te suenan parecidas? Un tiempo de preparación para los matrimonios que están esperando la llegada de su bebé.
MATRIMONIOS JÓVENES
Hablar de embarazo tiene su peculiaridad.
Si bien, es una noticia hermosa la que recibimos al enterarnos que pronto seremos padres, una mezcla de sentimientos surgen tanto en papá como en mamá.
Sentimos alegría y temor al mismo tiempo, por no saber qué vendrá, qué seguirá, cómo haremos para asumir este regalo de Dios, qué hacer en este tiempo de espera.
Mareos, vómito, cansancio, cambios de humor, son una realidad que nos acompaña como madres.
Pero no somos las únicas que experimentamos cambios durante el embarazo.
¿Te has preguntado qué pasa con papá?
¿Te has acercado a preguntarle? ¿Hace cuánto no se sientan a hablar uno con el otro?
Dicen que algunos esposos padecen los mismos síntomas que su esposa. Hay otros que difícilmente lo confiesan, pero además de esos síntomas, algunos pueden experimentar soledad.
¿Sabías que para muchos papás el embarazo y el inicio de la maternidad son una de las épocas más difíciles?
Los esposos y recientemente estrenados como padres de familia, llegan sentir una fuerte distancia emocional e incluso física.
El vínculo y apego entre madre e hijo marcan una diferencia, por lo que el esposo puede experimentar soledad.
Aunque no siempre lo externan, les llega a suceder. Aunado a factores como el trabajo, los horarios laborales, el cansancio y agotamiento.
Las hormonas, que también hacen lo suyo, vuelven el entorno un tanto complicado.
Por lo que es probable que aparezcan, discusiones frecuentes, riñas, desacuerdos.
En medio de esos momentos de dificultad en el matrimonio, se hace presente Jesús.
Nos habla a través de su palabra en la oración y nos dice como a los discípulos de Emaús “¿De qué van discutiendo por el camino?” Lucas 24, 17 Él, que no es indiferente a nuestras necesidades, nos habla al corazón.
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“Nos envía cuerdas humanas”
No dejemos de acercarnos a la oración, a los sacramentos. Pues Él, nos envía las gracias y la ayuda que necesitamos.
Incluso nos pone a personas indicadas en el momento indicado, que nos acompañan a vivir este proceso de cambio. Si necesitas ayuda, pídela. No olvides que Dios “Nos envía cuerdas humanas”. Cf. Oseas 11, 4
Deseo que al igual que los discípulos de Emaús, reconozcas a Jesús en tu esposa (o), en las gracias, ayuda y auxilio que te envía también a través de quien te rodea.
Oración:
Oro por tu matrimonio en este tiempo de Adviento, para que “sientan arder su corazón” Cf. Lucas 24, 32 y le reconozcan, mientras van caminando con Él.
Recuerda que las crisis son un llamado a crecer en el amor, a hacer vida la Palabra. Dios te bendiga.
Valeria Sandoval.
PSICÓLOGOS CATÓLICOS.
Recuerda que, si has intentado hacer algún cambio que te ha costado y no lo has logrado, o estás pasando por algún momento de dificultad o de crisis; existen profesionales (Psicólogos Católicos), que pueden acompañarte en el proceso y ayudarte a trabajar en ello.
Un Psicólogo Católico es un profesional de la Psicología, con un enfoque científico, fundamentado en la antropología cristiana-católica.
Psicólogo Católico.
Terapia de pareja.
Terapia familiar.
Terapia individual.
