.

Espíritu Santo, 5 pasos para dejarlo actuar en tu vida

Reflexionando sobre Pentecostés.

El otro día me encontré con un video de Dan Stevers sobre la historia de Pentecostés y me hizo reflexionar sobre cómo dejamos actuar al Espíritu Santo en nuestra vida diaria. 

El video se centra en el día de Pentecostés (Hechos 2, 1 – 23), cuando el Espíritu Santo baja en forma de llamas de fuego y los judíos que estaban cerca reaccionan de distintas maneras ante lo que ven en los Apóstoles. 

Unos están admirados, otros asombrados, otros tantos más dudan y hasta se burlan, creyendo que los Apóstoles están ebrios, mientras que estos últimos no dejan de alabar a Dios.

¿Cómo reaccionas ante el Espíritu Santo?

Ahora bien, cuando se trata de nosotros, ¿Cómo reaccionamos ante las inspiraciones del Espíritu Santo? 

¿Le abrimos nuestro corazón y dejamos que obre a voluntad? 

¿Lo dejamos actuar a medias, con recelos y dudas? 

¿Lo invocamos solo en Pentecostés y lo olvidamos el resto del año?

 ¿O creemos que eso es de “locos” y no nos atrevemos a acercarnos a Él?

Es por eso que quise compartirte en este post:

5 pasos para relacionarte con el Espíritu Santo.

Estas son 5 formas en que puedes aprender a establecer una relación con el Espíritu Santo, para conocerlo más y aprender a dejarlo actuar en cada área de tu vida.

1.  Aprende a escucharlo

No sé si te ha pasado, pero yo, cuando estoy en mi trabajo revisando algo, de repente me doy cuenta de un error que de otra manera no hubiera visto. Tal vez ya había revisado esa parte y de pronto mi mirada se enfoca en un punto y detecto ese error, así, de la nada. 

Bueno, pues así actúa el Espíritu Santo. Cuando somos dóciles y humildes, Él nos guía, nos muestra en lo que estamos bien y nos enseña lo que debemos corregir.

2. Hazlo parte de tus actividades

No podemos esperar recibir al Espíritu Santo si nos olvidamos de rezar, de orar. Hay muchas oraciones dedicadas a Él.

Ópuedes hacer una oración que salga de tu corazón. Lo importante es que al empezar una actividad, hagas una pausa y lo invoques. 

Pide su luz antes de iniciar el trabajo o de presentar un examen. Que Él sea tu guía si saldrás a carretera, que te ilumine si tendrás una plática difícil con alguien o si debes tomar una decisión complicada. 

Pídele siempre su inspiración para que puedas ser su instrumento y hacer todo para mayor gloria de Dios.

Espíritu Santo

3. Pídele sus dones

Si algo distingue al Espíritu Santo es que sabemos que Él otorga sus dones a todos los bautizados; sin embargo, muchas veces no oramos para pedirlos. 

Más que decirle ¿Qué don te gustaría o cuál crees merecer?, entra en oración y dile que derrame sobre ti, aquél o aquellos dones que Él sepa que más necesitas en ese momento, según la situación en que te encuentres.

4. Déjate llevar por Él

Empezar a invocar al Espíritu Santo, irremediablemente hará que comiences a sentir impulsos en tu corazón, que de pronto te llevarán a querer hablar con alguien, abrazar a una persona, hacer una buena acción por un desconocido… 

Tal vez te invite a cancelar esa tarde de películas y flojerita que estabas planeando para ir a visitar a un familiar o un amigo. Él tiene sus planes, ¡así que flojito y cooperando!

5. Revisa si vas por buen camino

Si bien es importante que aprendamos a dejarnos guiar por el Espíritu Santo, también debemos discernir si son sus inspiraciones las que nos mueven, y esto se logra viendo los frutos de nuestras acciones. 

En Gálatas 5, 22 – 23, se nos mencionan ¿Cuáles son los frutos del Espíritu Santo?. Si cuando actuamos, generamos alguno de ellos, ¡vamos rumbo al Cielo!

En conclusión:

Si quieres que a partir de este Pentecostés el Espíritu Santo esté más presente que nunca en tu vida y que te regale sus dones, invítalo cada día a formar parte de tus actividades, abre tu oído interior a sus inspiraciones y deja que Él tome el volante.

Aunque otros te digan que estás “loco” o “ebrio” como a los Apóstoles, ¡yo te aseguro que no te arrepentirás!

Oración

Espíritu Santo sé mi luz y mi guía. Ven, te necesito. Derrama tus dones sobre mí en este día. 

Ayúdame a que mi corazón esté siempre abierto a todas tus inspiraciones y a que sepa actuar conforme a lo que me dictas. 

Sé fuego abrasador en mi alma para que todo lo contrario a Dios se purifique. 

Santifícame para que cada acción mía en este día sea para mayor Gloria tuya. Amén.


Monse Reyes.

Escucha aquí este post.

PSICÓLOGOS CATÓLICOS.

Recuerda que, si has intentado hacer algún cambio y no lo has logrado, o estás pasando por algún momento de dificultad o de crisis; existen profesionales (Psicólogos Católicos), que pueden acompañarte en el proceso y ayudarte a trabajar en ello.

Un Psicólogo Católico es un profesional de la Psicología, con un enfoque científico, fundamentado en la antropología cristiana-católica.

Psicólogo Católico.
Terapia de pareja.
Terapia familiar.
Terapia individual.

¿te gustó este post?

Table of Contents

Sé parte de nuestra gran familia digital Católica

Artículos relacionados