Los obispos de España
desaconsejan las prácticas de sanación intergeneracional, por ser ajenas a la tradición y la doctrina de la Iglesia
Es la misericordia y la gracia de Dios la que se extiende de generación en generación, no la culpa ni el castigo.
Lo indica una nota doctrinal sobre la práctica de la “sanación intergeneracional” de la Comisión Episcopal para la Doctrina de la Fe de España publicada este martes 26 de noviembre de 2024.
Los obispos desaconsejan la práctica conocida también como “sanación del árbol genealógico” por ser ajena a la tradición y la doctrina católicas.
Y ofrecen respuestas sobre sus riesgos:
1. Culpas de los antepasados
¿Las culpas de los antepasados pesan sobre mí?
“El pecado es siempre personal y requiere una decisión libre de la voluntad. Lo mismo ocurre con la pena del pecado”, explica la nota.
Cuando se habla de pecado original, se le llama pecado de manera análoga pero “su castigo no pasa a la siguiente generación”, afirman los obispos.
Adán “solo transmitió a todo el género humano la muerte y las penas del cuerpo, pero no el pecado que es muerte del alma”.
¿Adán y Eva son nombres simbólicos o no? ¿Existieron?
2. Pecados de los padres
¿No dice la Biblia que los pecados de los padres recaen sobre los hijos?
Algunos textos del Antiguo Testamento dicen efectivamente que una recompensa o un castigo abarcarían a la familia, al clan o al pueblo.
“Sin embargo, esta concepción de la responsabilidad corporativa, que ponía en entredicho la justicia de Dios (···) evolucionó”, explica la nota.
Los obispos citan varios pasajes bíblicos sobre la responsabilidad que tiene cada hombre sobre su propio destino.
Y destacan las palabras de Jesús al curar a un ciego de nacimiento: “Ni él pecó ni sus padres”.
Sacerdote aclara el tema de los pecados intergeneracionales.
3. Perdón postmortal
¿Puede haber un “perdón postmortal” de pecados graves?
La comunión de los santos permite un intercambio de bienes espirituales -solo positivos-. La oración de intercesión entre vivos y difuntos ayuda efectivamente a cada alma.
Pero “es el mismo individuo, en su identidad personal, el que se purifica para el encuentro con Dios y no hay una biografía postmortal modificando la personalidad o añadiendo acontecimientos sustanciales a una biografía ya terminada durante la vida terrena”.
4. Pecados de los mayores
¿No son evidentes las consecuencias del pecado de mis mayores?
Permanecen ciertas consecuencias temporales del pecado: el sufrimiento, la enfermedad, la muerte, las debilidades del carácter, la inclinación al mal…
Pero, como indica el Catecismo, “el bautismo perdona todos los pecados, el pecado original y todos los pecados personales, así como todas las penas del pecado”.
¿Los pecados se heredan? ¿La solución es la sanación intergeneracional?
5. Misas de sanación
¿Las Misas de sanación liberan de los pecados de los antepasados?
Las Misas de sanación o de liberación no son consideradas en el Ritual Romano. Sí contempla, en cambio la celebración de la Misa para pedir por los enfermos.
También ofrecer la celebración eucarística como sufragio por los difuntos, pero sin la conciencia de que uno tiene que limpiar sus culpas.
Misas de curación y liberación: ¿qué dice la Iglesia?
6. Oraciones de curación
¿Cualquier persona puede hacer oraciones de curación?
Sí, todos podemos rezar pidiendo la sanación. Pero “cuando se trata de encuentros de oración, estos han de someterse a la vigilancia del Ordinario del lugar”, dicen los obispos.
“Y en caso de realizarse en un lugar sagrado -añaden-, conviene que sea un sacerdote o un diácono quien las realice”.
Fuente: Aleteia
Oración
Padre, ponemos en tus manos nuestras vidas y esta sociedad en la que vivimos. Enséñanos a estar en el mundo pero sin ser del mundo, sino a ser de ti.
Muéstranos tu camino y voluntad en todo momento, pero también, danos la gracia para buscarte e ir a ti. Amén.