Triduo Pascual, Viernes Santo
Queridas hermanas y queridos hermanos, estos días, los días santos como decimos; de manera particular el Triduo Santo, el Triduo Pascual; nos invita a que guardemos silencio en nuestro interior, este Viernes Santo.
Asimismo, a que contemplemos a Cristo de manera particular en los acontecimientos de su Pasión y Muerte en la cruz y a que escuchemos sus palabras.
La Pasión de Jesús
También, yo quiero invitarles en esta ocasión de manera insistente, a que volvamos a leer la Pasión.
Pero que en el momento de leerla, tengamos frente a nosotros, en la medida de lo posible, una imagen de un crucifijo, que nos indica hasta dónde fue Cristo, para mostrarnos el Amor del Padre.
Y que frente a la luz de Él, miremos cómo empienzan a quedar de manifiesto los sentimientos, las profundidades de las distintas personas.
Así, podemos leer la Pasión, mirando las reacciones de cada persona, ¿Cómo reacciona Pedro, cómo reacciona Judas?
¿Cómo reaccionan los que lo van a juzgar, los sumo sacerdotes?, ¿Cómo reacciona Pilatos, las autoridades civiles?
A continuación, ¿Cómo reaccionan los que eran discípulos? (como dice el mismo texto), pero lo eran en secreto; como Nicodemo, como José de Arimatea. ¿Cómo reacciona la Virgen María?
Antes bien, leamos desde esa óptica la pasión, y miremos cómo hay muchos de estos sentimientos y muchas de estas reacciones en nosotros.
Cómo en muchos momentos tenemos las mismas reacciones que las de Pedro, a las de Judas que traiciona, a las de Pilato.
Reacciones semejantes también a aquellos que están como a escondidas siendo discípulos de Jesús.
Miremos en la luz de Cristo.
En la luz de su pasión, mieremos los sentimientos y los afectos, miremos las emociones, todo lo que hay en nuestro corazón.
Por eso, mi insistencia de leer la Pasión estos días, en particular la que nos presenta el evangelista San Juan.
Leamosla si es posible, ante la imagen de un Cristo en la cruz y miremos las emociones, los sentimientos que hay en nuestro interior.
Así que, al terminar de leer y meditarlo, hagamos esta oración muy breve, esta invocación muy breve: “Cristo, ten piedad”.
Acción litúrgica de la Muerte del Señor. Viernes Santo. Presidida por el Excmo. y Rvdo. S. Dr. Don Andrés Vargas Peña, Obispo de Xochimilco, de la Santa Iglesia Catedral de Xochimilco.
